Dr. Rafael García Chacón:

A veces el médico prescribe a un paciente el uso de anticoagulantes, para prevenir o tratar algunos problemas circulatorios. Los anticoagulantes más usados son la warfarina y el acenocumarol, con varios nombre comerciales.

Entonces le suele decir algo como “evite comer verduras” o en casos más refinados el nutricionista o el médico conocedor les suelen decir  “no coma vegetales verdes”.

¿QUÉ TAN JUSTIFICADA ES ESTA RECOMENDACIÓN?

Tiene algo de cierta y más de equivocada, ya que a pesar de lo limitante no es suficiente para el adecuado el control dietético complementario a la anticoagulación. Veremos por qué esto es así y que es lo que realmente hay que recomendar para un control dietético adecuado en estos casos.

VAMOS POR PASOS

  • Lo primero:

La warfarina y el acenocumarol actúan porque inhiben la activación de la vitamina K, por lo que son conocidos como antagonistas de la vitamina K.

Como estos anticoagulantes actúan así un aporte aumentado de tal vitamina atenta contra la eficacia del medicamento.

Debemos saber que la vitamina K que tenemos proviene en porciones similares tanto de los alimentos o vitamina K1, como del metabolismo de las bacterias intestinales (microbioma), la vitamina K2.

  • Lo segundo:

Si bien debemos tener algunos cuidados directos con la alimentación, también entonces debemos tener algunos cuidados con el microbioma intestinal.

Lo cierto que un pequeño consumo de alimentos ricos en vitamina K no altera de un modo significativo el balance de la vitamina K, por lo que su uso no tiene por qué estar prohibido, sino bien regulado.

Debemos  conocer entonces cuales son LOS ALIMENTOS MÁS RICOS EN VITAMINA K: en primer lugar los vegetales verde OSCUROS como la espinaca, la col rizada, brócoli, las coles de Bruselas. PERO TAMBIÉN son ricos en vitamina K, el hígado, Kiwi, germen de trigo y algunos aceites como el de soya, algodón y oliva.

Por lo tanto el viejo concepto de evitar los vegetales verdes era demasiado incompleto, por un lado prohibía innecesariamente muchos vegetales importantes y por el otro descuidaba fuentes importantes de vitamina K que sin control podrían interferir con la acción de tales medicamentos.

Lo más práctico es que el consultante tenga un listado de estos alimentos realmente importante y que sepa que deben restringirse, de tal modo que su uso es moderado y si se come uno de ellos en una comida hacerlo con moderación y evitar en la misma los otros.

El otro aspecto es que la alimentación permita cierto control sobre la microbiota intestinal productora de vitamina K, por ejemplo, evitar la flatulencia ya que esta es producto de una fermentación aumentada, lo que conlleva a un aumento de la síntesis de vitamina K. La mayor parte de los alimentos flatulentos no son verde oscuros, pero también hay que restringirlos, sin prohibirlos.

  • Lo  tercero:

Por otra parte es importante evitar el estreñimiento, pues el esfuerzo al evacuar aumenta el riesgo de sangrado, especialmente si hay gastritis, úlcera, hemorroides, heridas y otras posibles fuentes de sangramiento, por lo que la dieta debe aportar una buena cantidad de vegetales y otras fuentes de fibra.

Finalmente: como el uso de antibióticos suele alterar la microbiota intestinal y ello podría inducir un incremento de la producción de vitamina K, es recomendable indicar suplementación con probióticos (fermentos lácticos) que la reequilibre.

RECORDAR:

Que una alimentación que ayude a la salud también debe ser abundante en verduras. No debe ser que para ayudar a una persona con estas condiciones tengamos que darle una mala dieta que termine deteriorando su salud en otras áreas.

Por lo tanto la persona que usa anticoagulantes debe saber que debe consumir una alimentación sana, es decir Bio compatible, por lo tanto rica en frutas y verduras, prestando atención especial a la familia de las coles tanto por su alto aporte de vitamina K como por ser flatulentas.

NOTA FINAL:

  1. Como la hoja del tabaco es tan rica en vitamina K, es importante advertir a los que mascan tabaco que eviten esta práctica.
  2. Si bien esto que dijimos es ciertos para los anticoagulantes orales de más uso, no se deben tener estos cuidados con los que son inyectados o con los nuevos y costosos anticoagulantes orales, ya que actúan por mecanismos diferentes vinculados a la denominada cascada de la coagulación.

PARA SABER MÁS:

  • Revisar el libro El Código Alimentario, para los nuevos conceptos de lo que en realidad es una dieta sana.
  • En una futura publicación hablaremos con detenimiento de alimentos flatulentos y antiflatulentos, aciertos y errores acerca de los mismos en la consulta habitual.
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