• Existe una diversidad amplia de suplementos para el corazón.
  • Una nueva investigación nos muestra que tan útiles pueden ser.

Dr. Rafael García Chacón.

Estamos bombardeados por diversas vías de un marketing dirigido a la medicación de la gente, tanto para los enfermos como para los no enfermos, en estos últimos se dice que es para la prevención.

Según esta forma de ver las cosas todos deberían tomar algún medicamento y/o suplemento.

Con respecto al uso de suplementos dietéticos se dice que todos los necesitamos porque la alimentación no nos puede dar lo que necesitamos, ya que se come mal, pero aunque se comiera bien “como los suelos están empobrecidos los alimentos no suplen lo que deberían” por lo que no habría forma de alimentarse bien.

LA GRAN PREGUNTA…

¿Puede realmente la suplementación compensar las fallas de la mala dieta?

La tesis de que si puede ha chocado con diversos estudios en grupos humanos comparando los resultados con y sin suplementos. Estos no han mostrado ninguna ventaja consistente.

En cuanto a las enfermedades cardiovasculares, que son por mucho las que más matan e incapacitan gente, hay una gran profusión de suplementos que pretenden proteger al corazón de enfermos y sanos.

De nuevo, aquí los estudios del pasado no han mostrado ninguna ventaja real.

La industria de los suplementos ha respondido frente a esto que, como dichas investigaciones se han realizado con personas con buenas dietas no se ha mostrado nada, ya que lo que hacen los suplementos es suministrar lo que falta cuando se tienen dietas deficitarias, entonces los suplementos sí protegerían a sus usuarios.

LA NUEVA INVESTIGACIÓN:

Con el fin de responder esta pregunta un grupo de científicos del Hospital Brigham and Women’s, en Boston, realizaron una investigación de gran tamaño y larga duración.

Ellos examinaron los datos de un estudio en curso de más de 14.000 médicos estadounidenses de sexo masculino, de más de 50 años de edad.

Los resultados fueron que el uso diario de multivitamínicos no redujo el riesgo de enfermedad cardíaca, ni siquiera en este subgrupo con una peor nutrición.

Fuente: Howard Sesso, del Hospital Brigham and Women’s en Boston. JAMA Cardiology. April 5, 2017.

NUESTROS COMENTARIOS:

  • La explicación central del porqué estos resultados, es que la vieja forma de ver la alimentación se basa solo en nutrientes y calorías, dejando por fuera miles de compuestos no incluidos como nutrientes que tienen un gran impacto sobre la fisiología y la salud.
  • Los suplementos tienen su lugar en la práctica de la medicina y de la nutrición, pero se ha exagerado su papel en base al mercadeo amplificado por el entusiasmo de algunos y los intereses de otros.
  • El uso de los mismos en casos puntuales, adecuadamente seleccionados, puede ser muy provechoso, pero el uso masivo suele ser una pérdida de tiempo y dinero.
  • Ni todos los enfermos requieren consumir medicamentos, ni la mayoría de los no enfermos requieren suplementación. El requisito central para estar sano y prevenir las enfermedades es un estilo de vida adecuado, en el que la alimentación juega un rol determinante.
  • Si se trata de enfermedades cardiovasculares, como en este caso, la acción más poderosa para prevenirlas es comer biocompatible, es decir, con alimentos adecuados, cuya complejidad está muy lejos de abarcar la actual industria de los suplementos.
  • Mejores resultados se tendrán si esta alimentación se acompaña de ejercicio físico, descanso apropiado y un estado mental sano.
  • Si hay una enfermedad cardíaca establecida, el manejo alimentario apropiado (Dietoterapia de Alto Impacto) puede producir resultados mayores que los medicamentos.
  • Este último será el tema central del segundo módulo de Dietoterapia de Alto Impacto, que iniciaremos en Ciudad de México y en Villahermosa en pocos días.

Para saber más: Te recomendamos realizar nuestro Diplomado de Dietoterapia de Alto Impacto, para mayor información acerca del mismo solo tienes que llamar en la Ciudad de México a los teléfonos 5574.6984 o al 4210.2935.

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